martes, 21 de septiembre de 2010

El Infierno


El director Luis Estrada nos vuelve a sorprender con “El Infierno”, audaz película que nos muestra un México crudo y caótico. Es un acercamiento satírico a la situación social actual de México. Fue estrenada días antes de la celebración Bicentenario de la Independencia. Este hecho le da un plus ya que nos muestra de una manera “graciosa” que tan brutal puede llegar a ser la realidad de nuestro país.

Benjamin García (Damián Alcázar), Benny, es deportado de los Estados Unidos. De regreso en casa y en un escenario poco prometedor, Benny decide formar parte del negocio del narcotráfico , en el cual consigue por primera vez en su vida, un ascenso espectacular rodeado de dinero, mujeres, violencia y diversión. Pero de pronto él descubre que la vida criminal nunca mantiene sus promesas. Comedia épica llena de humor negro acerca del mundo de la mafia y crimen organizado, “El Infierno” nos ayuda a entender lo que todo mundo pregunta: ¿Qué le está pasando a México hoy en día?
Estrada ha regresado con gran fuerza desde “La Ley de Herodes” y “Un Mundo Maravilloso”. La sátira representada en “El Infierno” nos muestra realmente que tan cerca estamos de una guerra civil, la cual nadie quiere ver ni darse cuenta. La película tiene espectaculares tomas del desierto de San Luis Potosí que sirvió de marco para el desenvolvimiento de memorables personajes, como el de Damián Alcázar que se transforma de un pueblerino inocente a un despiadado matón; o Joaquín Cosío, un hombre salvaje, pero también un hombre de familia.


Creo que Estrada quiere decirnos con este filme que no hay nada que celebrar en “una tierra de nadie”, donde la ley esta hecha para esos que tienen el dinero para corromper al sistema. “El Infierno” no sólo es la imagen de un duro presente, sino también de un futuro sin esperanzas.

El tema principal es, claramente, el tráfico de drogas; pero en este caso, es solamente un pretexto para mostrar que el narcotráfico no es el único problema, ya que este es la consecuencia de una larga “tradición” de acuerdos entre personas poderosas y el gobierno. Esta película es fácil de ver y aunque contiene escenas bastante violentas, nunca serán tan impactantes como las que se ven todos los días en los diferentes medios de comunicación.

Amor y violencia, lealtad y sentimientos se mezclan en este largometraje. Felicitaciones a Estrada por su valor para decir como están las cosas en verdad. La recomiendo bastante.

Calificación: 9/10

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